Atticus ha escrito una
nota hace 11 añosComenzando por lo de Escocia: A los escoceses se les prometió, en caso de ganar el NO, que mejorarían sus derechos y libertades como escoceses (algo impensable en España). Aquí, directamente, el negacionismo para con el mero hecho de que opine un pueblo acerca de su futuro (característica inequívoca de verdadera pluralidad, el poder ejercer el derecho a la autodeterminación), es la única opción reaccionaria que se contempla con normalidad, al tiempo que se tilda de radicales locos a los catalanes y de defensores de la democracia y la constitución a partidos tan poco aperturistas como PP y PSOE (¿la constitución?, ja. Se la saltan para lo que quieren y aluden a sus arcaicos artículos también para lo que les apetece). El absurdo llega hasta el punto de querer que vote toda España para algo que sólo atañe a los catalanes como pueblo. Mmm, me imagino votando a un madrileño o a un andaluz sobre los catalanes y me entra la risa floja, joder. Es un esperpento.
El problema fundamental de todo esto es el no querer reconocer (por parte del estado español),y actuando para ello en consecuencia, que hay tres naciones históricas dentro de sus límites, y que sistemáticamente han sido maltratadas culturalmente. Yo estaría dispuesto a ceder y vivir en un estado federal o de un plurinacionalismo verdaderamente asumido, pero no en esto que tenemos. La máxima española nunca ha sido la de integrar sanamente, sino, a base de una erosión continúa, la de ir españolizando (palabra muy de moda ahora. Gracias Wert por tu inconsciente ayuda para la causa), tanto cómo fuera posible, a esas extrañas gentes y sus desnortados anhelos (porque así es cómo se nos presenta al resto de la sociedad española).
Salakov, ¿estás a favor del derecho de autodeterminación de los pueblos?, ¿y de la lucha palestina? Si la respuesta es un sí, honesto y verdadero, no hay mucho más que hablar. El resto son pretextos falso progresistas (con los que justificar, puede, un tapado conservadurismo, que no lo sé) o en su defecto síntomas de un completo desconocimiento de la situación real. ¿Por qué digo esto?, pues porque es muy sencillo tirar de literalidad para atacar a un nacionalismo al interpretarlo como una ideología que en última instancia desemboca en fascismo. Error. El contexto es básico y primordial para poder comprender mínimamente la situación. El nacionalismo español (chovinismo) no tiene razón de ser porque su estado ya está constituido y éste no necesita ser reivindicado. Por lo tanto este nacionalismo a día de hoy responde únicamente a la nostalgia facha que muchos aún padecen. No debería ser necesario explicar esto pero: es obvio y evidente que una nación SIN estado está abocada al proselitismo permanente, al hacerse escuchar reivindicando lo suyo, sin que esto signifique que desprecia lo de otros, sino que simple y sencillamente quiere lo que es justo (y te voy a dar mi opinión particular: el día en que Galicia sea independiente –o sea, nunca, porque aquí somos tontos del culo, gracias al auto-odio sembrado por los españoles- yo me dejaré de banderitas y demás hostias porque ya no tendré ninguna necesidad de ello. Entonces, ese día, y sólo ese día, yo también hablaré del ridículo de los símbolos y las banderas y abrazaré esa casi utópica filosofía de manual tan cómoda y poco empática).
En Galicia, y acabo, donde, a diferencia de vascos y catalanes, nuestro nacionalismo carece de toda burguesía (aniquilada por los españoles, así tal y cómo suena), es evidente que éste posee un componente de clase obrera, y por tanto de IZQUIERDAS. Lo siento, pero las ideas del BNG, por ejemplo, están más próximas al comunismo que al nazismo (de hecho nada tienen que ver con las últimas y sí mucho con las primeras. El Bloque es una aglomeración de partidos de muy diversas ideologías de izquierdas).