En cuanto al poder de satisfacción a nivel nacional, y viendo hoy por la tele la legión de satisfechos jaleando a sus héroes, no he podido evitar que una frase de Schopenhauer me viniera una y otra vez a la cabeza. Concretamente esta frase:
"Todo imbécil execrable, que no tiene en el mundo nada de que pueda enorgullecerse, se refugia en este último recurso, de vanagloriarse de la nación a que pertenece por casualidad."
Todo el rato, oigan, como un mantra. Y conste que me alegro por los que se alegran, pero vaya, que se le den las vueltas que se le quiera dar al tema... panem et circenses.
:-/
\"El olor de los cadáveres, claramente perceptible bajo los del pasto y del humus mezclados, no me resulta desagradable, es demasiado dulce tal vez, un poco impetuoso, pero infinitamente mejor que el que emiten los vivos, sus pies, sus dientes, sus sobacos, sus frentes pegajosas y sus óvulos frustrados....
\"El olor de los cadáveres, claramente perceptible bajo los del pasto y del humus mezclados, no me resulta desagradable, es demasiado dulce tal vez, un poco impetuoso, pero infinitamente mejor que el que emiten los vivos, sus pies, sus dientes, sus sobacos, sus frentes pegajosas y sus óvulos frustrados....
"El olor de los cadáveres, claramente perceptible bajo los del pasto y del humus mezclados, no me resulta desagradable, es demasiado dulce tal vez, un poco impetuoso, pero infinitamente mejor que el que emiten los vivos, sus pies, sus dientes, sus sobacos, sus frentes pegajosas y sus óvulos frustrados....