LA INSTITUTRIZ Y LOS DOS NIÑOS por sedacala
La obra de Henry James es extensa y consecuentemente toca muchos temas, algunos ciertamente repetitivos como: “americanos y europeos”, “americanos en Europa”, “Italia o la fascinación del arte”, “viajando por Europa”, etc. Pero, un tema tan peculiar como el del cuento de fantasmas, lo tocó solo en este libro y apenas en algún otro de la misma época y menos éxito.
Y creo que su incursión en el género es brillante al salirse de los esquemas habituales en los que el espectro aparece y produce la consabida temblequera. No es por esa vía por la que James conduce su relato, su objetivo no es pasmar al lector con sustos o presencias terroríficas, que obviamente están por ahí y aparecen, pero induciendo apenas leves escalofríos. Su interés es otro; el quiere manejar el relato con su estilo basado en el análisis psicológico de los personajes incluyendo quizá entre ellos a los mismos aparecidos. Buscando ese objetivo crea una red de conexiones psíquicas entre unos y otros, juega con sus personalidades y sus caracteres y va sumergiendo al lector interesado en un laberinto en el que, a pesar de la dificultad para encontrar la salida, se encuentra a gusto.
De todas formas aquí el autor contó con una historia especialmente propicia para soportar esos juegos psicológicos a los que era tan aficionado y a su vez entrelazarlos con una narración con muchas posibilidades en el terreno de una sutil especulación, casi policíaca. El resultado es un libro corto pero muy jugoso y abierto a varias interpretaciones posibles a las que se presta admirablemente.
Tratándose de Henry James es inevitable hablar de su prosa. Mi experiencia previa con este autor (LAS BOSTONIANAS, DAISY MILLER y EL RETRATO DE UNA DAMA) y las conversaciones sostenidos con otros lectores sobre sus obras, me enseñan que no es un escritor fácil que guste a una mayoría, es más, creo que no les gusta a la mayoría, aunque tiene un puñado de incondicionales que disfrutan, y bastante, leyéndole. Al decir que no gusta a la mayoría, insisto en que me estoy refiriendo a un conjunto de lectores entendido y ducho en lecturas de calidad, es decir, no a lectores habituales de “Best Sellers”. Las razones de este desencuentro entre ese público culto y el escritor están indudablemente en su manera de escribir. Sus novelas se basan en buena parte en los densos diálogos que sostienen arduamente sus personajes buscando matices con los que mantener la pulsión psicológica requerida; ahí el ingenio y la brillantez de unos y otros van alimentando continuamente la narración poniendo a cada cual ante el dilema propio de cada historia (cada novela tiene el suyo). Así, las frases que se esgrimen son complejas, largas y un poco retorcidas al querer que expresen ideas que también son extensas, tortuosas y complicadas.
Este es el Henry James que yo conocía hasta ahora, pero en OTRA VUELTA DE TUERCA se había ya iniciado el proceso que cambió la forma de escribir de su autor.
Cuando publicó este libro en 1898, ya había empezado a utilizar un amanuense debido a una molestia en la muñeca que le impedía escribir cómodamente. A partir de ese momento su trabajo consistía en dictar utilizando la voz mientras un ayudante le escribía a máquina. Este sistema hizo su prosa aún más retorcida al tener un origen más vocal que escrito. En mi opinión este efecto se percibe bastante en el lenguaje utilizado en OTRA VUELTA DE TUERCA que sobre todo en las partes del libro más cargadas de diálogos se vuelve menos comprensible en primera instancia y exige a veces releer para comprobar cual de las dos mujeres es la que ha dicho tal frase y cual la réplica, ya que en el fragor del diálogo entre ambas habías perdido la noción de quien estaba hablando. También cuando trata de explicarnos el conflicto interior de la institutriz sus frases se retuercen, primero en una dirección e inmediatamente en la contraria, complicando bastante su entendimiento y además de forma, creo yo, un poco innecesaria. Nada de eso me ocurrió en EL RETRATO DE UNA DAMA, que a pesar de ser un libro largo y prolijo me resultó muy accesible y me satisfizo como una de aquellas escasas veces en que te identificas al máximo con el libro que tienes entre manos.
En resumen, un autor muy especial que sólo suele gustar a su público más entregado, pero que en este caso, teniendo en cuenta que el tema de que trata pertenece a un género que, me consta, tiene muchos seguidores, es muy posible que interese a personas que no han tenido contacto previo con la obra de James, y que podrían tenerlo utilizando esta novela como trampolín, posponiendo para después la decisión de intentar otros títulos suyos o plantarse aquí.
Escrita hace 12 años · 4.4 puntos con 12 votos · @sedacala le ha puesto un 8 ·
Comentarios
@SokraM hace 12 años
Me ha encantado tu reseña Sedacala. Has fundido opinión, anécdotas y referencias para crear un texto muy ilustrativo sobre la obra de este gran autor clásico. Además me has dado el empujón definitivo para empezar con él pues, aunque llevo bastante tiempo alucinado con los comentarios sobre Henry James en SdL (donde parece gustar mucho a usuarios que sigo), no tenía claro qué obra podría ser la mejor para adentrarme en su literatura.
A pesar de que llevaba un tiempo pensando en “Los papeles de Aspern”, creo que comenzaré con “Otra vuelta de tuerca” que, por lo que dices, tal vez no sea la más representativa de su prosa pero, desde luego, parece muy interesante.
@Faulkneriano hace 12 años
Buen comentario, Sedacala. En una cosa discrepo: a James sí le tentaron los cuentos de fantasmas, y de hecho tiene un buen puñado (especiamente memorables Maud-Evelyn y La esquina alegre), aparte de otros cuentos que coquetean descaradamente con el fantástico. Dede luego, Otra vuelta de tuerca, es el más famoso. James pasaba mucho del cuento de fantasmas clásico, como conocerá cualquiera que haya leído esta obra, pero es indudable que le atraían los elementos fantásticos más de lo que se suele conceder. El gran escritor de cuentos de fantasmas victoriano -aunque hay donde elegir- es su tocayo, M.R. James, inglés hasta la médula y sin ninguna relación familiar con Henry.
@sedacala hace 12 años
SokraM, gracias por tu favorable opinión; me parece muy bien tu decisión de hincarle el diente al autor con este libro, pero fíjate en que mi comentario hace hincapié en que este texto tiene una mayor dificultad que otros, sólo recordártelo. De todas formas mencionaré, aunque ya alguna vez lo hice, la existencia de Colm Toibin, escritor irlandés actual, en cuya novela THE MASTER, se interesa por la vida y la obra de Henry James y nos ofrece, un retrato suyo muy interesante, abordando aspectos de su personalidad y recreando de alguna manera su misma forma de escribir, además de ser de una gran calidad. Es un libro que a mi particularmente me encantó, aunque es interesante leerlo cuando ya se conozca alguna lectura de James.
Ya se Faulkneriano, que HJ escribió alguna otra cosa en esta línea espectral. Pero no soy, como creo haber dicho ya, un entusiasta de los cuentos ni de los relatos o novelas cortos. Se que a muchos os entusiasman, pero no a mi. Necesito entrar mucho (muchas páginas) en las novelas para empezar a disfrutar, para centrarme con los personajes o con el ambiente. Algo que tenga una extensión de 50 páginas se me ha acabado antes de empezar a enterarme. Tendrían que ser autores con capacidad para “ponerte en situación” casi desde que empiezas a leer y eso no es fácil, ni siquiera tratándose de género fantástico que por otra parte, tampoco me gusta. Total, que prefiero tocar poco ambos géneros.
@Faulkneriano hace 12 años
Ríndete al cuento, Sedacala: es género exigente, pero gratificante.
SokraM, James es una elección magnífica, y creo que Otra vuelta de tuerca es muy accesible; eso sí, abstenerse los que no estén en condiciones de saborear la sutileza y la ambigüedad. La novela que recomiendo para iniciarse con Henry James es Washington Square, sencilla y emocionante a la vez.
@SokraM hace 12 años
Me apunto también Washington Square, Faulkneriano. Estoy deseando empezar con Henry James. No sé si serán buenas tan grandes expectativas, pero bueno, espero saber controlarme.
@nikkus2008 hace 12 años
Otra vuelta de tuerca, Los papeles de Aspern y creo nada más he leído de James. Ambos me han gustado, ahora bien, no he podido con "La leccion del maestro", obra que intentaré concluir en algún momento de mayor lucidez mental, ya que al parecer requiere mucha atención. Me he perdido más de una vez en esta obra, posiblemente y como ya he dicho, por mi culpa.
Le pregunto a los tres, Faulkneriano, Sedacala y SokraM ¿Que libro, entre la ingente obra de James, me recomendarían para continuar conociéndolo? ¿Hay alguna que sea "algo más accesible", o bien menos intrincada?.
Estaré atento a sus recomendaciones.
Un abrazo para todos!
@BriGid hace 12 años
A mi este cuento, relato o lo que sea que quiera ser, ni fu ni fa, fué mi primer intento con Henry James y antes de adquirir el ejemplar no me di cuenta que se trataba de un relato, porque si llego a percatarme anteriormente este no hubiese sido mi primer encuentro con HJ ya que no soy capaz de disfrutar con los cuentos, me cuesta horrores, no les encuentro todo la gratificante que me dan las novelas.
@Faulkneriano hace 12 años
Pues, Brigid, otra vuelta de tuerca es una novela, de pocas páginas, pero novela. Los cuentos, que yo sepa, son menos extensos. No es que no te gusten los cuentos, es que no te gusta James (o ambas cosas)
@BriGid hace 12 años
jajaja Dudo que no me guste James si es el primer y unico ejemplar que me he leido de él, tendría que probar con alguno más para testificarlo, es más, esta novela ni siquiera me pareció mala, pero no para tirar cohetes, entretenida, sin más. Y no, no me gustan los cuentos, ni relatos ni similares excepto algunos de Poe, pero es que Poe es otra historia aparte.
@Poverello hace 10 años
Lo terminé ayer y lo primero que he de decir es que me ha sorprendido mucho el estilo que James marca en esta novela distanciándose diametralmente de todo lo esperado (y supongo que contemporáneo) sobre el género fantástico y de fantasmas en particular. Tanto es así el pasmo que me ha producido el año de creación que le subí la nota teniendo en cuenta estos aspectos mucho más allá de la peculiar y original forma de escribir a la que acertadamente haces referencia en tu reseña, sedacala.
Un detalle. Hasta el final, y aún después de él (por muy clara que pueda parecer la relación íntima entre el espíritu de Miles y el señor Quint), no me queda nada clara la existencia real de los fantasmas, pues aparte de la institutriz nadie hace referencia real a haberlos visto más allá de interpretaciones o contestaciones a preguntas directas de ésta. Es decir, que no sé yo si James pretendía mucho más que contar una mera historia de fantasmas, pues su dedicación a los aspectos psicológicos (a los que también haces referencia en la reseña) me hace suponer la importancia capital que le concede el autor a los 'traumas' o limitaciones personales que nos hacen percibir la realidad de una manera determinada.
@sedacala hace 10 años
Poverello, te digo como a Tharl: mucho tiempo sin comentar nada, ya era tiempo, me alegro.
Veo que te ha gustado H. James. Acabo de darme un repaso por su bibliografía recogida en SdL, y me parece que excepto “Otra vuelta de tuerca”, que es la estrella, con 35 votos, las demás novelas languidecen, véase si no: “Retrato de una dama”, 9 votos, “Los papeles de Aspern”, 6 votos y las demás, 2, 1, o ninguno, y son bastantes los libros que tiene registrados en SdL. Es decir que, tal como lo decía yo en la reseña, es un autor difícil o poco querido por los lectores. Sin embargo a mi me encanta. Sólo he tenido un tropezón con él, porque “Los embajadores”, no la pude soportar. Es una novela que corresponde a su última época, esa en la que dictaba sus textos, y saqué la conclusión de que, al final de su vida, se le fue bastante la olla. Empecé con él leyendo “Las bostonianas”, única que leí de su etapa americana, y que me empezó ya a enganchar; luego pase a “Daisy Miller”, novelita corta situada en Roma que me gustó más aún; “El retrato de una dama”, fue un libro que me impactó, ¿realmente es impactante? dirás, sé que para mucha gente no lo es, ni mucho menos, en el foro de SdL se leyó por varios soperos en una fase anterior a mi llegada y leí varios comentarios en un tono bastante displicente; pero a mi en cambio me impactó; pero sigo. Vino después “Otra vuelta de tuerca”, que, aunque me gustó, no fue de las que más, como tú dices, el tema de si los fantasmas están ahí o si sólo se cree que están, suscita dudas, en fin no es mi preferida; continué con “Los embajadores”, no la terminé, fracaso absoluto, era un texto retorcido hasta el extremo de ser incomprensible, lo deje. Vino después Poor Richard, otra novelita corta, ¡Ah! esta también está ambientada en América, otra vez lucen sus dotes de analista de la mente de los personajes, bien por tanto; Después leí Los papeles de Aspern, situada en Venecia, más de lo mismo pero mejor aún, una de las mejores, parece mentira que de una historieta tan simple y tan intrascendente puedan crearse unas situaciones tan intensas y tan llenas de matices. Y ya por último he leído de él “Crónica de una amistad”, que incluye las cartas que se intercambió con su amigo R. L. Stevenson, durante dos o tres años hasta que éste murió de tuberculosis en una isla del Pacifico. No es novela, pero puedes ver en esa correspondencia, o al menos, eso vi yo, como era una excelente persona, culta, seria, equilibrada, en un contraste radical con la personalidad de su interlocutor, que era un tipo echado para adelante, vehemente, polemista y de personalidad extrovertida. Quizá en el fondo no difiere tanto esto del carácter que se presupone por sus obras. Volviendo a James, diría, ya lo he dicho otras veces, que hay un libro del irlandés Colm Toibin, escritor actual, que se llama “The Master, retrato del novelista adulto”, es un libro a mitad de camino entre su biografía y una novela sobre su vida, a mi me gustó mucho, y creo que saca bastante bien su talante y su personalidad, aquí mucho más complicada de lo que parece deducirse de sus cartas con Stevenson. Después de lo dicho, es fácil comprender que Henry James, es uno de mis autores favoritos. El tratamiento que le da a las personalidades de sus personajes me parece fantástico y ha conseguido que entre mis temas de novela favoritos, este tan suyo de la novela psicológica sea, quizás, el que más me satisface.
Así que, esas ideas que observo que se te han quedado en la mente después de leer “Otra vuelta de tuerca”, podrían ser un indicio y marcar la senda que conduce a su manera más personal de escribir novelas, por ahí van los tiros. Si entre la lectura de esta novela y el rollo que yo te he contado consigues hacerte una idea de cómo es y te gusta, te apetecerá leer muchos más libros suyos.
@Faulkneriano hace 10 años
Poverello, lo mejor de esta historia de fantasmas es que probablemente no tiene fantasmas; es más bien la historia de una neurosis, adivina de quién. Los niños son del todo inocentes: Jack Clayton, cuando filmó su espléndida versión para el cine, la tituló Los inocentes. E hizo muy bien. Leída así, supone un devastador panorama de la represión victoriana, llena de lodo.
@Poverello hace 10 años
No es rollo en absoluto, sedacala. Mucho aprendo de tus comentarios, al igual que de los de otras monstruos de la web. Me anoto alguna de sus obras, faltaría más.
Ando liado, y por eso entro pero no tengo demasiado tiempo de comentar (reseñas ya ni hablo, snifff).
Eso pensaba yo, Faulkneriano, sobre el fondo de esta novela de enjundia. No podía ser de otra manera. La peli de Clayton, "Suspense" en castellano en uno de esos cáusticos ejercicios de traducción y que es una maravilla, la vi no hace demasiado tiempo, pero para mi torpeza, hasta que no me la nombraron por otro medio ni la asocié con la novela. Y es que es calcada.
