BATMAN: ROSTROS por Atticus

Portada de BATMAN: ROSTROS

Esta historia se encontraba, casi a modo de generoso contenido adicional, en un ejemplar donde "La broma asesina", claro, tenía todo el protagonismo. Sin embargo creo que "Rostros" merece tener su propio huequecito por aquí (su propia ficha).

No me extenderé mucho pero, y al margen de una sobrante moralina final sobre la autoaceptación y cierta indulgencia a la hora de justificar los actos de Batman (como necesario justiciero), he de decir que forma y fondo son más que disfrutables.

Sus personajes, casi sin excepción, son inadaptados sociales llenos de deformidades físicas o taras psicológicas que los empujan forzosamente a esconderse de un sistema que los repudia. Debería resultarnos sencillo empatizar con ellos por el mero hecho de que, la mayoría de los mortales que vivimos en sociedad, tenemos defectos e imperfecciones que nos humanizan, mas se nos ha enseñado a diluir nuestra singularidad para encajar en el absurdo de la "normalidad" y no ser señalados. Así funcionan las cosas, desgraciadamente, en Gotham y en nuestro plano.

Es casi imposible, por otra parte, no pensar en la influencia directa que sobre este cómic tuvo la película "La parada de los monstruos" (Tod Browning, 1932; Tit. Ori: "Freaks").

Las ilustraciones no tienen la calidad de detalle, por comparar con el otro citado y aunque sea injusta la comparación o poco procedente, de "La broma asesina"; pero tampoco lo necesita ni creo que lo pretenda. En la obra de Moore, Bolland y Higgins la composición de las viñetas y su detallismo nos facilitaba mucho la lectura, casi haciéndonos sentir algo comodones (claro que ¡bendita comodidad!). "Rostros", sin embargo, implica, aún a riesgo de ser algo caótico a veces, una mayor atención por nuestra parte, con una composición de las viñetas arriesgada, atractiva y llena de ritmo.

Escrita hace 3 años · 5 puntos con 2 votos · @Atticus le ha puesto un 8 ·

Comentarios