LA DICHA DE UN CHAVAL DE 15 AÑOS por Poverello

Portada de EL MISTERIO DEL CUARTO AMARILLO

Que nadie se lleve a engaño: mi voto es el del niño-adolescente que fui hace como 25 años, cuando chismorreando y trasteando por la librería de mi padre vi una portada blanca sobre la que resaltaba en un recuadro la cama de un cuarto amarillo. Lo más cerca que había estado de Leroux por aquel entonces era haber visto en televisión El Fantasma de la Ópera -que no sé cómo mi madre me dejaba verla, y ni sabía, "obviously", que era del bueno de Gaston-. Y no sé por qué, supongo que por ser aquella edición de Anaya Infantil y juvenil, me puse manos a la obra con las andanzas de Rouletabille y su misterio del cuarto amarillo. No lo dejaba ni para comer.
El caso es que, pasados esos más de 25 años, sin haber tenido que recurrir al útil Internet, recuerdo como si fuera hoy mismo la portada, la edición y la editorial, y puedo jurar sobre la tumba de Conan Doyle y de Poe, a los que leí después, que soy injusto con su Holmes y su Dupin, pues su heredero es el que constantemente me viene a la cabeza si alguien me los menta.
Y la dicha experimentada por ese chaval de 14-15 años que fui mientras leía a Leroux ha de haberse quedado indefectiblemente grabada a fuego en mi memoria, pues -sin tener de nuevo que recurrir al útil Internet- recuerdo todo, todo, todo... y eso no me ha pasado jamás en la vida.
¡Y que nunca más haya leído nada más de él! Será para no romper el encanto; no sabéis el chasco que me llevé cuando, absurdamente, volví a ver Mazinger Z en la tele, urghhhh.

Escrita hace 12 años · 3.8 puntos con 4 votos · @Poverello le ha puesto un 7 ·

Comentarios

@Poverello hace 12 años

De una manera cuanto menos extraña, me comento a mí mismo, pues en mis reseñas me siento "condenado" a no querer desvelar nunca nada de los argumentos -hay tanta gente que prefiere la absoluta sorpresa-, para l@s otr@s, el misterio (más o menos): nuestro querido detective, no recuerdo con quién más, escucha desde el salón cómo una mujer es atacada en su dormitorio, tras entrar en la habitación sólo hallan a la mujer, en la cama, en una sala sin más puertas ni ventanas.

@Faulkneriano hace 12 años

Es el misterio perfecto. el cuarto cerrado, a lo Ellery Queen, a lo Agatha Christie. Sólo que Leroux es anterior. Y tiene mucha más gracia, y un sentido profundamente francés de lo gótico, de lo macabro, de lo granguiñolesco. Sólo hay que leer El fantasma de la ópera. Yo también leí El misterio a los quince años... Y todavía me acuerdo, si no de la resolución del misterio, sí del planteamiento, que es siempre lo más sugestivo. Aún recuerdo con escalofrío La muñeca sangrienta, que me impresionó extrañamente. Este hombre era muy raro.