Sí pero no por arspr

Portada de EL METAL PERDIDO

Con El metal perdido se cierra la tetralogía de Wax y Wayne y con ello la segunda era de Nacidos de la Bruma, en su lucha con los malvados "The Set" (en inglés) y por extensión el dios Trell.

Y sí la aventura se cierra adecuadamente con la siempre fastuosa imaginación de Brandon Sanderson. Y además se cierra yo creo que siguiendo los pasos que les encantarán a muchos de sus lectores más "fan". Ya, pero eso no tiene por qué ser especialmente bueno, y mucho menos si uno se acerca a los libros con una mente mucho más abierta.

Recuerdo dos cositas al respecto de esta nueva tetralogía:
+ La primera es que, en la primera trilogía, mi valoración final, (escribí hasta DOS reseñas en El imperio final), es que era uno de los mayores derroches de fantasía, originalidad y cierre coherente de todos sus aspectos que había leído nunca. Y además, con una sorpresa tras otra según el propio adagio de Kelsier: "Siempre hay un secreto más..."

+ La segunda es la propia intención expresada por el autor de explorar en esta segundo ciclo la evolución tecnológica inevitable en cualquier sociedad "medieval" por muy mágica que sea. Porque antes o después alguien inventará la máquina de vapor, (que digo yo que en el Señor de los Anillos, el agua también hierve y esto tiene sus consecuencias y aplicaciones), inventará una pólvora u otra y, sobre todo, se dará cuenta de las curiosas cosas que pasan cuando mueves adecuadamente un hierro magnético dentro de un cable metálico enrollado sobre sí mismo, o cuando consigues separar las fases de oxidación y reducción de metales en cualquier pila.

Y este segundo aspecto sí está más o menos bien desarrollado en esta serie donde la sociedad ve evolucionando desde un Far West (casi, casi "medieval") a un principios del S.XX incluso con su particular bomba atómica. Y donde queda claro que incluso los dioses, los magos y sus poderes, nada pueden hacer frente a la barbaridad que es E=m*c^2 que rige nuestro universo.

Ya pero para mí el problema es que creo que la concreción de la primera trilogía, y su fastuosa novedad, se le está escapando por los dedos al propio Brandon Sanderson. Y además esto pasa por varias decisiones conscientes del propio autor para vender más libros y para "emocionar" a los lectores más fieles.

+ La historieta final de este libro, y su resolución, atufa a reciclado de "El Héroe de las Eras" con el particular Héroe volviendo a ser justo el que menos te esperas. (Un poco como ocurre con los refritos de StarWars en su última trilogía).

+ Antes alababa la concreción y cierre del primer ciclo. Ya pero eso no vende libros futuros. Es mucho mejor "inventarse" conexiones y personajes que pululan entre los múltiples ciclos del Cosmere y que harán las delicias de los que buscan "huevos de pascua". Ya pero es que esto afecta incluso a la estructura narrativa, porque le permite al autor efectuar "Deus-Ex-Machina" horrorosos que es justo contra lo que siempre se había pronunciado. Cuando ya tenemos nuestras magias metálicas bien establecidas con sus adecuados límites, me permito saltarlas por los aires, con visitas a Shadesmar (El Archivo de las Tormentas) que permiten los viajes interplanetarios, a los Seon (Elantris), al control de la arena (Whiteshand), a Hoid y a los Ghostbloods (en todos casi), etc. etc. Esto hará las delicias de muchos, pero a mí me agota. Incluso el plantearse que los "malos" son de un Dios extranjero que viene a tocar las narices es muy pero que muy traído por los pelos. El que mucho abarca poco aprieta.

+ Y por supuesto déjate abierta toda la interacción de los Brazales de Duelo y los habitantes del Continente Sur con su peculiar tecnología que queda sin desarrollarse, tan importantes en el anterior libro, y que al final no valen para absolutamente nada en esta historia. Más que nada por si mañana me apetece seguir con una Era Tres de Nacidos de la Bruma supongo que ambientado en una Space Opera... Que hay que asegurarse los garbanzos y vender camisetas...

Total que sí, que aventurillas correctas pero ya. Ni mucho menos el despliegue de originalidad de la primera trilogía.

Escrita hace un año · 0 votos · @arspr le ha puesto un 6 ·

Comentarios