Un José Carlos Somoza... por arspr
... para lo bueno y para lo malo.
Sí, el señor Eloy Moreno acaba de transmutarse en José Calos Somoza en su mejor versión al menos en este libro (es el primero que leo de él, por lo que poco puedo opinar de su trayectoria general).
Para lo bueno porque es libro tiene un argumento francamente original con sorpresas finales muy pero que muy interesantes y, (salvo alguna cosilla que se puede argumentar y que no voy a comentar para no descerrajarlo), francamente bien cerrado en todos sus aspectos. Sí, sin ningún lugar a dudas, al nivel de Clara y La Penumbra, Dafne Desvanecida o La Llave del Abismo. Además, tocando a lo largo de todo el libro temas de tanta actualidad como esta absurda y autodestructiva sociedad de consumo en la que cada día estamos más y más enfangados. Y todo ello narrado con una prosa ágil, sencilla y que mantiene la tensión y las ganas constantes de lectura para seguir avanzando.
Y para lo malo porque esa prosa ágil, la verdad es que es igual de sosota e impersonal que en José Carlos o en dos mil bestsellers, (buenos o malos da igual). Y para lo malo porque sobre todo como comenté en Clara y La Penumbra, a Eloy Moreno le ha dado miedo hacer un libro verdaderamente grande. Porque le sobran reflexiones de todo-a-cien obvias. Porque la trama en sí misma y la forma en que se va narrando es ya suficientemente intensa como para no necesitar las toneladas de cliffhangers, de "ya verás lo interesante que se pone esto", que pueblan sus páginas. Porque le sobran frases grandilocuentes pseudo-intelectualoides a cascoporro. En fin, porque en vez de pensar en un lector adulto al que el libro se le abra por sí solo, al final está pensando en ese lector de consumo que por otro lado entra dentro de la crítica central del libro. Porque, como decía, le ha dado miedo, o no ha sabido, hacer un libro verdaderamente grande simplemente podándolo, simplemente dejando hablar a sus páginas.
Como ya decía en mi reseña en Clara y La Penumbra me deja un regusto agridulce. Y no por lo malo o flojo que sea, que no lo es en ningún caso, es un libro total y absolutamente recomendable, sino por lo extraordinario que podría haber sido, por la sensación de oportunidad perdida.
Escrita hace 3 años · 5 puntos con 1 voto · @arspr le ha puesto un 8 ·
