Bueno, tras un verano casi totalmente analfabestia, he finalizado, (recomenzándolo), el libro con el que lo inicié. Un pequeño clásico de la literatura australiana.
Y un buen y recomendable cortito libro. El descenso a los infiernos de un pobre paria que se cree más listo que el demonio y el demonio siempre tiene unas cuantas cartas marcadas y guardadas.
La verdad es que ni la premisa, ni el desarrollo ni muchísimo su "luminoso" y moralista final son nada extraordinariamente revolucionario ni innovador, pero el libro tiene carisma. Consigue que todas las piezas y pasos vayan encajando uno tras otro sin que parezcan forzados. Que te creas que estás sudando como Grant en ese infierno sofocante del desierto australiano, donde lo poco que separa a un hombre de la locura es la siempre garantizada existencia de una cerveza bien fría por obra y gracia de un milagro... envenenado...
Lo peor del libro: claramente su final. En concreto su capítulo 5 entero (y casi casi la mitad de la última frase del 4). Pero claro la redención es mucho más tragable y políticamente correcta que el fundido a negro. Si no fuera por ello quizás le hubiera votado con un 9.
Escrita hace 5 años · 4 puntos con 1 voto · @arspr le ha puesto un 8 ·