SUPERÓ AL PRIMERO por bimm

Portada de LOS CHICOS QUE CAYERON EN LA TRAMPA

Me gustó mucho y, obviamente mucho más que el primer libro de la serie, sobre todo porque me reconcilié con el subcomisario Carl Mørck. En esta entrega se empodera de su cargo y toma las riendas de su nuevo caso con su habitual estilo mordaz y poco apegado a las normas, pero que ahora se percibe muy encantador, en vez de despreocupado y autocomplaciente como lo sentí en el primer libro. Por lo mismo Assad y Rose, la nueva y genial integrante del Departamento Q, pasan a tener un rol más bien secundario.

La estructura del libro tampoco es común. Antes de las primeras diez páginas ya se sabe quiénes son los responsables del homicidio que investiga el Departamento Q, pero lo interesante es ir descubriendo poco a poco qué fue lo que en verdad pasó. A pesar de lo anterior, la novela tiene un ritmo muy ágil que incluso, pasada la mitad, se vuelve realmente vertiginoso.

Un excelente desenlace, tal y como debía ser para los lectores que esperábamos justicia para todas las víctimas, pero como en otros libros de este autor, me deja con una sensación muy melancólica, por todo aquello que pudo haber sido y no fue. Me pasó con el personaje de Merete Lynggaard de La mujer que arañaba las paredes y, por supuesto, con Kirsten-Marie Lassen de esta novela.

Escrita hace 7 años · 0 votos · @bimm le ha puesto un 9 ·

Comentarios