CAMBIO PRÍNCIPE POR LOBO FEROZ por Shorby

Portada de CAMBIO PRÍNCIPE POR LOBO FEROZ

Siempre digo que los libros escritos por “gente de la tele” no me llaman nada la atención, no sé por qué, además no la veo apenas.
El caso es que me ha surgido leer el de esta chica, que tengo que decir que me cae fenomenal y me gusta bastante cómo trabaja.

Bien, tenemos un libro de no-ficción en el que la autora desglosa a su manera diferentes cuentos e historias que todo el mundo conoce… pero comparándolas con el género masculino.
Habla de lo que nos “inculcan” en cierto modo, de los príncipes azules, el amor verdadero, bla bla bla; todo muy Disney.
Sin embargo, a la vez que nos va mostrando tópico tras tópico en cada capítulo, desgranando y analizado todo (de manera bastante simpática, tengo que decir), descubriendo tapujos y mercados en los que no debemos ni poner el pie, va encasquetándonos otros tantos, que no dejan de ser lo mismo pero a la contra.

Nos habla de ese Peter Pan que alguna vez se nos ha cruzado, el eterno niño que al principio te hace gracia pero luego le ahogarías por infantil… con su inseparable super-mega-amiga Campanilla, que normalmente –para ti- es un zorrón (vale, a veces lo es) y por la que Peter pondría la mano en el fuego sin dudarlo.
¿Y a quién elige? A la Campa. Y tú te quedas con Garfio –porque Smee da grimilla-.
Pero claro, ni tanto ni tan calvo, que lo mismo el Capitán se te pone a hacer una disertación sobre el calentamiento global y la economía sumergida, de donde no le sacas ni a espadazos y tampoco es plan.

Todos sabemos que hoy en día lo del príncipe azul de sonrisa profident y vestido con mallas, como que no, aparte de que mosquearía ya de por sí, por mucho que ahora se lleven los pantalones petados y subidos de tobillos.
¿Qué debes hacer? Tirarte a por el lobo (y al lobo, por qué no).
¿Y qué pasa después? Pues que el lobo es un cabrón (que esto no lo dice el libro, pero suele pasar).
Y así saludamos a la pescadilla que se muerde la cola, masticando mil y un tópicos que siempre están ahí de una forma o de otra, analizados del derecho, del revés, con esquemas y sin ellos.

El libro es entretenido, no lo puedo negar, se lee bastante rápido, como digo es una lectura muy simpática que incluso te arranca la sonrisa en alguna ocasión. Pero la verdad es que no pasa de ahí.

El típico “libro para mujeres” que, bueno, si lo lees, bien y si no, también.

Escrita hace 8 años · 0 votos · @Shorby le ha puesto un 5 ·

Comentarios