EL ALQUIMISTA IMPACIENTE por Shorby

Portada de EL ALQUIMISTA IMPACIENTE

Premio Nadal del 2000.
Segunda entrega de la serie protagonizada por los Guardia Civiles Vila y Chamorro.
Aclaro que se pueden leer independientes, pero soy Doña Manías y prefiero ir por orden. Así que allá vamos.

La historia comienza, como en la anterior novela, directamente en la escena del crimen… y si se descuida no deja ni mentalizarse a uno.
Explicado de manera bastante gráfica y, de nuevo, por boca de Vila, nos ponen rápido e situación con el cadáver y empezamos la investigación del tirón, que hay mil cosas que hacer.

La víctima era trabajador de una central nuclear y aparentemente llevaba una vid ejemplar.
Pero todo se trunca cuando a medida que van investigando descubre que quizá Trinidad no era tan ejemplar como parecía.
Y además no es el único muerto.

De nuevo, el autor nos deja una historia con muy buen ritmo, contada de manera que podemos reconocer perfectamente Vila, con esa forma tan peculiar de llevar a cabo los casos… acompañado de la fiel guardia Chamorro, de la que soy super fan, me encanta el personaje, tanto como el tándem perfecto entre ambos, con ese tira y afloja casi constante y diálogos llenos de sarcasmo y toques nada sutiles que me han arrancado la sonrisa en más de una ocasión.

Una trama muy bien llevada, con un ritmo sin altibajos, de esos de sin prisa pero sin pausa.
Personalmente, me paro a pensar por dónde narices empezaría a investigar con dos datos de mierda como los que tienen al inicio y no sabría por dónde pillarlo. Me encanta cómo se desenvuelve el autor.

Continuaré seguro con la saga y, de nuevo, queda mi recomendación.

Ojo, que en esta ocasión tenemos adaptación cinematográfica:

El alquimista impaciente, 2002, dirigida por Patricia Ferreira; con Ingrid Rubio como Chamorro y Roberto Enríquez como Vila.

Escrita hace 8 años · 4 puntos con 1 voto · @Shorby le ha puesto un 7 ·

Comentarios