MALDITO KARMA por Shorby

Portada de MALDITO KARMA

Tenía muchas ganas de leer este libro desde hace un montón de tiempo, me lo habían recomendado muchas veces diciéndome que me iba a partir de risa… pues bien, mi gozo en un pozo. Me explico.

Nuestra protagonista (con la que no he conectado nada de nada) es Kim Lange, una famosísima presentadora de televisión a la que van a premiar por lo buena que es en su trabajo (a destacar: en su trabajo).
Tras una noche de sexo desenfrenado con la competencia (Daniel Kohn) –mientras su marido Alex cuida de su hija pequeña en su “hogar feliz”-, Kim sale a tomar el aire y un lavabo de una estación espacial rusa le endiña en la cabeza y muere. Ajá. Así, se ve reencarnada (con aparición de Buda y todo) en una mísera hormiga; ¿por qué en una hormiga? porque no ha sido lo que se dice buena persona en vida, por lo que tiene que dedicarse a realizar buenas acciones y con ello, acumular buen karma.
Entonces pasa de dejar a un lado a su familia porque solo se preocupa de su trabajo y su físico, a querer estar a todas horas con ellos, sobretodo con la pequeña Lilly.

Básicamente, Safier nos explica una moraleja mediante las tropecientas reencarnaciones de Kim, hasta que ésta descubre lo que debe hacer para dejar de ser hormiga… y reencarnarse en algo más grande.

A lo largo de toda esta andadura, encuentra el mejor acompañante (requete-reencarnado) con quien puede dar: Giacomo Casanova -sí, el mismo-, que nos va contando sus memorias y demás mediante pies de página bastante graciosos.

Sinceramente, me ha parecido un argumento de peli de sobremesa, predecible, me ha faltado mucha chicha, pues al terminar de leerlo me ha quedado una sensación de vacío increíble (de las que te quedas con cara de tonto pensando “¡¿pero esto qué es?!” para continuar con un “bien, la próxima lectura no tiene el listón muy alto”).
Ojo, no digo que la novela no me haya gustado, es entretenida, pero me quedé con ganas de más, de echar alguna sonrisa, aunque supongo que iba con expectativas muy altas.

La verdad es que el libro se lee realmente rápido, a mí me duró tres días; es de lectura muy ligera, simple, tiene puntos curiosos, otros ñoñetes, sus diálogos son rápidos, … de hecho el comienzo no puede ser más original, te invita a seguir leyendo. Hasta que pierde fuelle.
Que es como a la mitad.

Escrita hace 11 años · 4.3 puntos con 4 votos · @Shorby le ha puesto un 5 ·

Comentarios

@abajareje hace 11 años

El (escaso) humor del libro es tan pueril como el argumento. No vuelvo a leer nada de este autor.