COMIENZA EL FIN por EKELEDUDU
Un piloto de avión, casado y padre de dos hijos -un varón todavía niño y una hermosa adolescente- que durante cierto tiempo ha intercambiado gestos insinuantes con una bella azafata, planea dar un paso más adelante en la relación entre ambos luego del siguiente vuelo que hagan juntos. En planes nada más quedará el piloto de marras, quien se llevará una sorpresa mayúscula en pleno vuelo: la súbita, inexplicable desaparición de buena parte de sus pasajeros, que se esfuman en la nada, dejando sólo sus ropas. No tardará en enterarse de que desapariciones similares están ocurriendo en todo el mundo, que de la noche a la mañana se ha vuelto un caos. Según algunos, la solución para dicho caos reside en cierto político rumano prontamente catapultado al firmamento de las celebridades internacionales, pero ¿es un líder auténtico, o sólo un títere cuyos hilos mueven otras personas tras bambalinas? No será una pregunta trivial cuando se empiece a esclarecer la probable causa de las desapariciones: el cumplimiento de profecías bíblicas. La gente desaparecida había aceptado a Cristo en su corazón o carecía de edad y discernimiento necesarios para hacerlo. Todos ellos han sido elevados hacia los Cielos para resuardarlos de los siete años próximos, los más terribles que la Humanidad haya conocido. En cuanto al político rumano, él o alguien de su entorno se revelará más tarde o más temprano como la figura más siniestra y despiadada en la historia del género humano: el Anticristo, ni más ni menos.
Resulta un tanto extraña la idea de que gente desaparezca arrebatada hacia los Cielos llevándose su cuerpo, pero no su ropa; pero el lector logra enseguida hacerse más o menos a ella. Por lo demás, debo admitir que me desconcertó bastante eso de una saga literaria (a ésta siguen otras nueve novelas) inspirada en el Libro del Apocalipsis; pero, ¿por qué no, después de todo? EL CÓDIGO DA VINCI ponía en tela de juicio muchos puntos de la fe cristiana; tenemos aquí otro best-seller que reafirma o avala una de las tantas interpretaciones que se han hecho del enigmático Apocalipsis. Porque sólo de eso se trata, de una interpretación con la que no todos concordarán; y así, por ejemplo, en la famosa bestia 666 algunos creen ver al Anticristo, mientras que otros pensaron que se refiere a Nerón, el emperador romano. De cualquier modo, ¿por qué no dar a esta novela la misma oportunidad que se le concedió a la novela de Dan Brown?
La literatura de ficción religiosa a menudo peca de ñoña, ya que pone un descuidado argumento descaradamente al servicio del mensaje o prédica que intenta transmitir. DEJADOS ATRÁS escapa en gran medida a tan lamentable regla, en parte porque uno de los autores, Tim La Haye, se ocupó de la prédica, y el otro, Jerry Jenkins, de desarrollar la trama. Pero debido quizás a que es una obra ambiciosa y, como tal, complicada de escribir, a que debe cubrir varios aspectos y a que los autores no querían hacer interminable la saga, hay ciertos puntos que en lo personal no me quedan demasiado en claro, como la conversión del piloto, de quien no se entiende si de verdad se ha convencido de la bondad y el amor de Dios, o si busca adular a éste para poder estar algún día con su esposa e hijo, que están entre los desaparecidos; por momentos parece lo primero y por momentos lo segundo. En cambio, es un gran acierto el análisis que este mismo personaje hace de su propia conciencia y de su conducta, primero a solas y luego ante la azafata. Pero señalemos que este acierto puede enajenarse a muchos lectores que no tengan su propia conciencia en orden y que no querrán admitir que están obrando mal. En ese sentido, este libro puede ser incómodo para algunos. Está bien que lo sea, después de todo.
Desacierto de la traductora: no hacía falta castellanizar los nombres de los personajes, y menos aún si el apellido permanece en su versión original. ¿Cuál es el sentido de hablar de "Camilo" Williams o de "Sandalio" Bayley? En fin... Habría más para comentar, bueno y malo, pero lo dejaremos para la próxima entrega de la saga.
Escrita hace 12 años · 0 votos · @EKELEDUDU le ha puesto un 6 ·
