Me encanta el mundo que Rothfuss ha creado alrededor de esta historia. Un mundo con diferentes seres, costumbres, leyendas, canciones y tradiciones que caracterizan a los diferentes pueblos de los Cuatro Rincones de la Civilización. Esta parte, en cambio, quizá pueda hacerse algo aburrida y lenta en algunas partes del relato, pero creo que es necesaria para explicar cómo Kvothe ha llegado a ser la persona que es, con todos sus bastos conocimientos y sus desgracias y se ha convertido en un posadero anónimo. Sólo lamento una cosa: al terminar El temor de un hombre sabio, he pasado a la lenta y sufrida espera del tercer libro...
Escrita hace 12 años · 3.2 puntos con 5 votos · @Glinwen le ha puesto un 8 ·