OTRO APRENDIZ DE MAGO PIERDE EL CONTROL por EKELEDUDU

Portada de UN MAGO DE TERRAMAR

Llamaremos Duny al protagonista de esta novela porque así se llama al principio, aunque luego de haga referencia a él como Ged o Gavilán. Duny, como Harry Potter, es un niño que posee ciertas habilidades mágicas; pero Terramar, el mundo que sirve de escenario a su historia, nada tiene que ver con el actual, sino que es el típico de las obras de fantasía heroica, situado en eras remotas, con ambientes rústicos y a menudo abundante en barbarie. También la naturaleza de la magia es distinta. Cuando se lee a Rowling, se tiene la sensación de que en el mundo mágico de Harry poco o nada es imposible, mientras que en los libros de Terramar la magia es, o bien algo que a menudo da miedo usar por motivos que podríamos llamar ecológicos (producir lluvia en un lugar podría traer sequía en otro) o algo que mayormente consiste en mero ilusionismo o, en fin, cualquier otra cosa para la que siempre parece existir un pero. No asombra que distintos personajes, comenzando por la tía del niño -una simple bruja de aldea- se esmeren tanto por encauzar correctamente las singulares dotes de Duny. Si bien esto también lo encontramos en la saga de Harry Potter, no tardaremos en descubrir, alarmados, que en este caso el peligro parece ser todavía más grave, algo paradójico si se tiene en cuenta que la magia es de una naturaleza más sutil.

En efecto, el problema, según iremos viendo, reside en la humana y por lo tanto falible condición del protagonista, que es impaciente y orgulloso. Un célebre mago, Ogión -cuya apabullante fama lo hace intimidante al principio, pero que en algún punto se volverá paternal y entrañable- lo toma a su cargo. Intenta transmitirle el conocimiento, pero el aprendizaje es lento y el muchacho siente que no puede esperar. Como aquel otro aprendiz de hechicero que tan famoso hicieran Paul Dukas y Mickey Mouse, su impaciencia lo llevará a abordar por su cuenta conjuros que requieren de un entrenamiento que él todavía no posee.

Pero es combinada con el orgullo que esta impaciencia provocará el desastre en uno de los momentos de mayor tensión de la novela. Duny -ya definitivamente convertido en Ged- es enviado a Roke, una escuela de magia, donde uno de sus condiscípulos se obstina en agredirlo verbalmente y humillarlo, insistiendo en que no es un verdadero mago. Y para que pruebe lo contrario, desafía a Ged a invocar el espíritu de un muerto. Es una prueba excesiva para Ged; no obstante, la acepta, y algo acudirá en respuesta a esa invocación. "Algo", no "Alguien"... Y algo que ni siquiera tendría que existir...

UN MAGO DE TERRAMAR es un libro muy original, en el que no hallamos malvados espeluznantes como Morgoth, Sauron o Lord Voldemort. Los invasores kargos son bárbaros ni mejores ni peores que cualesquiera otros, ficticios o reales, y Jaspe es un joven altanero y desagradable, pero ningún monstruo. Sólo esa horrible cosa convocada por un conjuro imprudente y mal hecho es de verdad terrorífica y malvada. Esta circunstancia termina de redondear la sencillez del mundo en que se desarrollan las aventuras de Ged y que la hace natural y creíble. Pero a no confundir. La habilidad descriptiva de la autora nada tiene de simple, al menos en su sentido más peyorativo, y alcanza niveles decididamente gloriosos.

La novela principia también una saga pero, y ésta es una opinión cuestionable, me parece que los volúmenes posteriores -al menos los que pude leer, LAS TUMBAS DE ATUÁN y LA COSTA MÁS LEJANA; tengo entendido que mientras tanto apareció al menos un volumen más- no alcanzaron la soberbia calidad de UN MAGO DE TERRAMAR. El cual, por si hace falta aclararlo, fue, es y será siempre uno de mis predilectos en el terreno de la literatura fantástica.

Escrita hace 12 años · 4.3 puntos con 6 votos · @EKELEDUDU le ha puesto un 10 ·

Comentarios

@BriGid hace 12 años

Libro que cogí con toda la ilusión del mundo y libro que me decepcionó de lleno.

@EKELEDUDU hace 12 años

Pues qué lástima que tu comentario haya sido tan escueto. Siempre es interesante ver qué hace que un libro que a uno le resulta de los mejores, para otro lector resulte decepcionante. Saludos.

@JaviOuck hace 11 años

A mi me parecio, por falta de otra palabra, bonito; sin mas, simplemente bonito.
No me decepciono, ya que no tenia demasiadas expectativas, pero me gusto mas de lo que me esperaba, me resulto facil de leer, bello, sencillo, clasico y entretenido; ¡bonito!.

@EKELEDUDU hace 11 años

Tengo que reconocer que al principio me desconcertó un poco. Hoy está entre mis preferidos en lo que hace a literatura fantástica, pero sus continuaciones no están a la misma altura, desde mi humilde perspectiva.

@JaviOuck hace 11 años

Si, pues me lei el segundo, y lastimosamente, este me quito las ganas de seguir leyendo la saga; aun asi, cuando tenga tiempo los leere.

@EKELEDUDU hace 11 años

Llegué hasta el tercero. Tengo entendido que hay por lo menos uno más.

@lucero hace 10 años

Tengo leídos y con gran gusto El nombre del mundo es Bosque y la Mano izquierda de la oscuridad.
Acabo de leer El Mago de Terramar y coincido es la inevitables comparaciones con Harry Potter, si bien no hay que olvidar que Le Guin escribió estos textos en la década del 60, mucho antes que J.K.R.
Me gustó mucho y por los motivos que mencionas en la reseña, que son recurrentes en las obras que leí : el adecuado equilibrio que pregona entre lo natural y lo sobrenatural o inducido.
La condición humana del mago y su soberbia sencillez y amo las descripciones de los mundos de Le Guin!!!
Y aclaro formalmente que NO soy lectora de literatura fantástica.
Pronto sigo con el libro 2 de la saga y veo si coincido con vos.
Saludos compatriota!

@EKELEDUDU hace 10 años

Saludos, Lucerito. Gracias por tu siempre valorado comentario.