Sinopsis
El 15 de marzo de 1842, cuando tenía siete años. Santiago Avendaño fue capturado por los ranqueles, con quienes permaneció como cautivo hasta que, siete años más tarde, pudo huir. Sus memorias constituyen un importantísimo documento histórico, indispensable para comprender algunos aspectos de la vida de los indios ranqueles. Pero es además un interesantísimo relato, que narra las penurias del autor durante su cautiverio, la arriesgada fuga y el extenso recorrido (atravesando las provincias de La Pampa y San Luis) por el desierto, luchando contra la sed y tratando de evitar el acecho de los jaguares. Avendaño, quien más tarde sería mediador entre los indígenas y el gobierno nacional, explica también la situación de otros grupos, liderados por caciques como Painé y Calfucurá, y completa la obra con un impresionante relato sobre su encierro en la cárcel de Palermo por órdenes de Rosas y su posterior conscripción obligatoria en las tropas federales.
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