Sinopsis
En la Apostilla final, Bufalino (Sicilia, 1920) afirma: "'Calendas griegas' se dice, como es sabido, de días imposibles, que jamás existirán. Sin embargo, aquí se refiere a días que no fueron nunca o fueron de otra manera, y que el autor va inventando paulatinamente al desarrollar la parábola de una existencia imaginaria". Se trata de unas memorias poco convencionales, en las que el autor selecciona unos hechos, silencia o distorsiona otros..., según su peculiar visión de la existencia humana. De ahí el subtítulo "Fragmentos de una vida imaginaria", aunque el punto de referencia es siempre la biografía del autor.
La narración comienza en el claustro materno y sigue en cuatro capítulos: infancia y pubertad, juventud, madurez, vejez y muerte. Sicilia, la Segunda Guerra Mundial, el regreso a su tierra y el trabajo como profesor enmarcan el relato, en el que son frecuentes los saltos en el tiempo, cuando un recuerdo resucita otros anteriores. Sin embargo, lo importante no es la descripción de los hechos, sino cómo están narrados y el punto de vista del autor.
Bufalino cuida el estilo; su frase es elegante, sonora; abundan los aforismos, las metáforas y comparaciones sugerentes, el lirismo. A lo largo del libro, mezcla la primera, la segunda y la tercera personas, y recurre a fragmentos en verso o a modo de diario, a diálogos teatrales, al monólogo intimista, y a la descripción más tradicional, según convenga a la situación del narrador. Éste es el aspecto más interesante del libro, junto con la ironía, que recuerda a Quevedo, por ejemplo, en la descripción de una visita al médico: el autor es buen conocedor de la literatura del Siglo de Oro.
LUIS RAMONEDA, Aceprensa.
Todavia no hay ninguna reseña.