200 LOCURAS PARA QUE TE QUEDES CONMIGO por Shorby

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Martín Piñol es alguien a quien nunca le he cogido el punto, al menos en su faceta como monologuista, que es en la que básicamente lo he visto.
Todavía no sé qué hacía este libro en mi estantería.

Empezamos por una agencia de detectives, la hija del dueño de una importante empresa se ha ido de casa (chica joven y mona, que lo tiene todo, incluso malas compañías) y les han encargado encontrarla. Por otro lado, la hija del dueño de la agencia se va al otro lado del charco porque al novio le han dado una beca muy importante… y el padre se niega a que su hijísima se vaya. Lo de siempre.
Aquí entra Martin, nuestro protagonista; el jefe de la agencia le pide ayuda porque no quiere perder a su hija -pues él cree que puede tener algo mejor, bla bla bla…- y además, siempre le ha gustado Martin como yerno. Casualmente, está pillado hasta las trancas de Alicia, así que le propone encargarse del caso… que tiene más similitudes con ella de lo que aparenta.

La historia está contada en primera persona, de manera cercana, que parece que te la esté contando mientras estáis de cañas. Punto para Piñol.
Llena de toques humorísticos (unas veces más que otras), las dos tramas se van hilando, conociendo tanto a Martin como a Alicia -que además de lo obvio, fueron profesor y alumna-.
Sí tengo que decir que no me ha parecido tan friki como esperaba (o al menos como prometía la sinopsis), salvo por un par de referencias archiconocidas y algún comentario chorra (muy yo) que me ha hecho reír bastante.

Es una novela entretenida, que se lee muy rápido, los capítulos son cortitos y está bastante bien llevada; como lo del humor es algo muy personal, diré que no me ha hecho reír a carcajadas, pero supongo que a otro podría pasarle perfectamente.

Sin ser la lectura de mi vida, la he disfrutado.

Escrita hace 7 años · 0 votos · @Shorby le ha puesto un 6 ·

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