Sinopsis
El inventor y cineasta Enrique Barreiro patentó en la primera mitad del siglo XX varios sistemas para colorear películas
El 2 de mayo de 1927 un joven pontevedrés asombró al público del Teatro Principal al proyectar la película «Pontevedra, cuna de Colón», producida y dirigida por él mismo. No porque la cinta ofreciese irrefutables datos sobre el origen del famoso navegante, sino porque el filme fue visionado en color, gracias un procedimiento inventado por el propio Barreiro. A la superación del blanco y negro dedicó este inventor treinta años de su vida, aunque finalmente sus proyectos no llegaron a cuajar, según el escritor Carlos López Piñeiro, «porque non se deron nin en Galicia nin en España as condicións suficientes para que se soubese sacar proveito industrial e cultural das súas iniciativas». Este autor presentará en enero el libro que ha elaborado sobre el cineasta.
Todavia no hay ninguna reseña.