EL FANTASMA DE LA ÓPERA por Shorby

Portada de EL FANTASMA DE LA ÓPERA

Creo que todo el mundo conoce “El fantasma de la Ópera” o al menos ha oído hablar de la historia, hay mil y un adaptaciones. Personalmente recuerdo el musical de teatro, lo vi en mi primer viaje a Londres, me flipó, de hecho se me saltaron las lágrimas en uno de los números.

Estamos en un famoso teatro construido sobre un lago subterráneo, Ópera Garnier, donde todo el mundo conoce la existencia del fantasma que habita ahí. Amante y conocedor de la Ópera, tiene su propio palco (a base de chantajes varios hacia los gerentes) e incluso se permite opinar sobre las cantantes, de manera muy poco considerada.
Cuando empiezan a ocurrir accidentes encadenados, todos los que no creían en el fantasma empiezan a mosquearse bastante e incluso se plantean cambiar de opinión, pues lo que él ansía es acaparar la atención de la vocalista de la que está enamorado.

Tenemos una novela gótica, de la que tengo que decir que es la primera lectura de este corte que me deja que “ni fu ni fa”. No he empatizado para nada con los personajes e incluso el fantasma me cae bastante mal, a veces me daba la sensación de ser rematadamente infantil y absurdo, quitando algo de seriedad a la historia.
Aquí me permito un inciso. Me acordé vagamente de “El fantasma de Canterville”, que sí tiene un humor que hila fino (vale que Wilde son palabras mayores), sin embargo el fantasma que nos muestra Leroux no tiene ni por asomo la gracia del de Wilde; no sé si era intención del autor francés darle un toque cómico o solo me lo ha parecido, pero desde luego no le encontré gracia de ningún tipo.

Vale que la novela de este tipo se caracteriza, entre otras cosas, por sus descripciones, por esas ambientaciones brutales tan bien creadas, ese terror tan peculiar que nos muetran siempre sus páginas… aquí me daba la sensación de que no me contaban nada en muchas, muchas páginas. Es más, en alguno de los capítulos me daba la sensación de que con la frase con la que comenzaba cada uno de ellos, me valía para saber qué pasaba en las páginas que lo conformaban.

Si bien en la historia el autor nos ofrece prácticamente de todo, desde el terror del propio fantasma con sus escenas catastróficas, con víctimas varias, hasta incluso un triángulo amoroso, drama y tragedia a partes iguales, incluso está basada en hechos reales; no sé qué me ha faltado exactamente, pero no me ha llegado todo lo que me llegó la obra de teatro en su día, por ejemplo, o lo que me ha llegado alguna de sus adaptaciones al cine… ni lo que suelen llegarme las góticas generalmente.

Sí creo que es un clásico que merece la pena leer y conocer, como Frankenstein, Drácula o Dr. Jeckyl y Mr. Hyde, pero desde luego no encabeza mi lista.


En cuanto a adaptaciones… tiene una barbaridad llevadas a teatros de todo el mundo, incluso una secuela del musical original de 1986 que transcurre diez años después.
Además, siguiendo con un pequeño paréntesis con la novela, hay desde libros sobre las versiones varias, hasta biografías del fantasma, secuelas, cómics y novela gráfica; algunos bastante interesantes.
Vamos ahora con las de cine:

-1916, la alemana, dirigida por Ernst Matray.
-1925, la genial adaptación con Lon Chaney Sr.
-1943, con Claude Rains.
-1960, cortometraje de Chicho Ibáñez Serrador que, evidentemente, no tiene desperdicio.
-1961, versión de animación.
-1962, la mítica versión de la Hammer.
-1974, el musical rock de Brian de Palma, bastante interesante.
-1983, adaptación venezolana para la pequeña pantalla.
-1987, otra de animación.
-1989, esta merece la pena solo por ver a Robert Englund en el papel.
-1990, miniserie de la NBC.
-1998, la adaptación de mi querido Argento… que no me gustó especialmente.
-2004, versión para el cine del musical de Webber.

Escrita hace 6 años · 4 puntos con 1 voto · @Shorby le ha puesto un 6 ·

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